Lunes//El musical de Chico Novarro y Betty Gambartes encontró en Juan Darthes y Cecilia Milone, dos sólidos intérpretes para cantar al amor. Con diálogos cantados a dúo o melodías que se descubren como confesiones en soledad, encuentra en la memoria romántica del público la más ferviente adhesión.
A veinte años de su estreno, "Arráncame la vida" conserva todo el esplendor que le confieren las inspiradas y bellas melodías que perduran en la memoria de distintas generaciones. Títulos que desafían los tiempos y legaron algunos de los nombres más importantes del género romántico por excelencia: el bolero.
Muchas de esas creaciones constituyen el eje y dan forma al hilo argumental del musical, exhibiendo el infinito universo de situaciones que supo ilustrar a lo largo del tiempo.
A tono con ello, "Arráncame.. no podía menos que iniciarse cuando uno de los miembros de la pareja decir poner fin a la relación. Y son los versos "nosotros que nos quisimos tanto debemos separarnos" en boca de Juan Darthes, los que abren la historia, para rematar su vínculo con Milone y monólogo musical expresándole "ya no te quiero".
Es a partir de ese momento cuando queda a la luz el juego dramático del musical, en suma un ingenioso rompecabezas que une letras y melodías diversas para plantear encuentros, rechazos, reproches e infidelidades, temas que alimentaron por años la vida de los boleros.
Distintos pasajes se conjugan y disparan la acción, para dar paso a títulos como "Esta noche vi llover", "Quiéreme mucho", "Inolvidable", "Acércate más" y otros, que darán paso a palabras como juramento, traición, llano, besos, lunas, olvido, culpas y un sin fin de palabras ligadas a la mística del noviazgo o el matrimonio.
Con diálogos cantados a dúo o melodías que se descubren como confesiones en soledad, la creación encuentra en la memoria romántica del público la más ferviente adhesión, que no duda en seguir con los labios y calladamente, cada uno de los versos..
Junto al sabor a miel de las letras, el humor no se escapa de algunas secuencias, celebrando la inmortalidad de un género que con infinitas variantes rítmicas, perdura y sigue conquistando adherentes.
LA NUEVA PUESTA
Estrenado por Novarro y Andrea Tenuta, "Arráncame la vida" conoció años después otra versión con el mismo Novarro y Silvana Di Lorenzo, dando pie también a la creación de otras realizaciones similares en su estructura.
En esta ocasión, son Darthes y Milone los que ponen su cuerpo y voz para recrear esta pareja que se mueve entre la pasión, los desencuentros y la vuelta al amor.
Con fuerza interpretativa y el profesionalismo que los distingue, cada uno hace entrega de lo mejor de sí para animar esta celebración al género, que casi no se ve como un espectáculo sino como un cálido concierto de temas inolvidables.
Darthes con el beneplácito de la platea femenina que abunda en la sala, no deja de despertar ovaciones, de igual modo que Milone, con garra y ternura cuando lo exige la puesta.
Vocalmente se dejan llevar por la línea argumental para jugar la historia dentro de una puesta minimalista de Pablo Novak, quebrada por la participación en escena del trío de instrumentistas que conforman el plantel orquestal de la pieza. Artífices de distintas sonoridades y climas, se lucen en piano, arreglos y dirección musical Daniel García; en percusión Rubén Calegari y en bajo y coros Pablo Giménez
Con coreografía de Analía Riamonde, vestuario armonioso y colorido para los distintos segmentos y dirección de Chico Novarro "Arráncame la vida", convocó a un inmenso auditorio que disfrutó plenamente del encuentro a juzgar por los continuos aplausos y los bises con que debieron responder los cantantes-actores.