El drama de vivir con vecinos ladrones

Miércoles//A una vecina le entraron a robar, le revolvieron toda la casa y hasta le arrancaron una reja. Los ladrones viven a pocos metros. Uno fue detenido pero 10 días después volvió al barrio. Críticas al juez Pablo Moran, quien decidió liberar a uno de los ladrones 10 días después.

Existía un viejo código en el submundo del hampa que decía que un ladrón no le robaba a los vecinos de su propio barrio. Esta ley no escrita, que solían cumplir a rajatabla los delincuentes, hace tiempo que pasó a la historia.
Hoy a cualquier pillo no le importa si al que le roba es el vecino. Le da lo mismo llevarse la escoba del patio, la ropa del tendero o violentar rejas, puertas, ventanas y arrasar con todo lo que encuentre.
Vivir a metros de ladrones es un problema que se repite en muchos barrios de Luján. Delincuentes de poca monta que no tienen el menor reparo en entrar a una casa para robar, aunque lo estén observando los vecinos. Si llegan a ir presos, recuperan la libertad con una velocidad asombrosa. Una vez en la calle, el círculo delictivo nuevamente vuelve a empezar. 
Algo parecido le paso –y le pasa- a Nadie Kette, víctima de un robo en su vivienda de Villa del Parque, cometido por dos conocidos delincuentes que residen a metros de su domicilio.
Por sus propios medios, logró recuperar algo de todo lo robado. La Justicia ordenó la detención de uno de los implicados pero 10 días después, el ladrón regresó al barrio. La víctima se los cruza prácticamente a diario.

EN PRIMERA PERSONA
Harta de tener que soportar esta situación y ante la falta de respuesta del Estado (en este caso de la Justicia), Kette siguió la sugerencia de un policía y decidió hacer público el caso en las redes sociales y en los medios masivos de comunicación.
En diálogo con EL CIVISMO, recordó que el robo tuvo lugar en su vivienda de calle Alfonsina Storni esquina Corrientes. La tarde del sábado 23 de mayo, Kette se encontraba en la Basílica. En medio de la misma recibe un llamado de su hermano comunicándole que habían entrado ladrones a su casa.
Cuando llegó, sus vecinos le dijeron que habían visto a dos personas saltando el tapial. Eran caras conocidas del barrio emparentados desde hace rato largo con el delito. La vecina damnificada obtuvo nombres, apellidos y dirección de los delincuentes.
"Me robaron un montón de cosas de las cuales pude recuperar algunas. Como los vecinos me dijeron que había sido esta gente, fui a la Policía y hasta la casa (de los ladrones)", dijo.
En efecto, policías la llevaron hasta los domicilios de los sospechosos pero no se bajaron de la patrulla. Kette debió sola enfrentar la situación. "Cuando llegué hablé con la abuela de uno de los dos (ladrones) y le pedí que me diera lo que me habían robado porque no iba a parar hasta verlos presos", recordó.
Entre lo robado estaba una computadora donde tiene almacenado sus estudios de contadora, un televisor LCD, una tablet, entre otros objetos. Los ladrones habían arrancado una reja, revolvieron toda la vivienda y se llevaron hasta la alcancía con las monedas que ahorraba la hija de 5 años.

LOS MISMOS DE SIEMPRE
Los ladrones fueron dos jóvenes de apellido Casco y Sarube. El primero vive en Darwin y Misiones. El segundo calle de por medio. "Me atendió la abuela (de Casco) y me dijo que su nieto no había sido porque se encontraba en la casa pero yo tenía a mis vecinos de testigos", expresó la vecina damnificada.
Mientras la abuela negaba lo que habían visto muchos y la discusión amenazaba con prolongarse en el tiempo, de pronto apareció el joven sindicado de ladrón quien, en un primer momento, negó tener participación en el hecho al tiempo que delató a su vecino Emanuel Sarube.
Kette cruzó de vereda, habló con la madre del otro acusado en el hecho quien primero salió en defensa de su hijo pero cinco minutos después, cuando la Policía se retiró de la zona, se hizo presente en la vivienda robada para devolver la notebook, un DVD y la tablet. En cambio, Kette no pudo recuperar el LCD, el cargador de la computadora, algo de dinero, la alcancía y varios elementos más.
Al día siguiente, fue a la Fiscalía. "Insistí para que hagan algo porque llevé hasta testigos y logré que los detengan", comentó.  Finalmente, Sarube fue aprehendido. Estuvo 10 días detenidos y recuperó la libertad.
"El 19 de junio me llegó la notificación que le daban la libertad y que tenía una perimetral a 200 metros de mi casa pero lo menos que hace es cumplirla. Esto es muy injusto porque me los cruzo todo el día por mi casa. Es insólito: estuvo 10 días presos cuando entró a mi casa, me rompieron y robaron todo. Paso por calle Santa Fe y los veo todos los santos días. Que alguien lo meta preso de vuelta porque esos chicos van a seguir robando –pidió-. Lamentablemente, es así. No cambian más. Acá en el barrio desvalijaron un montón de casas. Entran y salen como si nada. Sarube tiene causa por robo y por droga. A otra vecina de calle Santa Fe le pasó lo mismo y tuvo que ir con la Policía para que le devuelvan las cosas", denunció indignada.
En la notificación que recibió Kette, Sarube se comprometió a realizar un tratamiento por su adicción y a respetar la distancia con la vivienda robada. Pero como nadie lo controla, suele ser visto bebiendo cerveza y merodea por Storni y Corrientes como si nada hubiese pasado.

INDIGNADA
"Me lo cruzo continuamente a ellos y a sus familias que los tapan y dicen que son buenos, que trabajan... En el barrio los vecinos están indignados porque nadie los mandaba presos y cuando alguien los mandó presos, enseguida están sueltos. Entonces, todo es una risa. Hice todo lo que debía y no puede ser que no los metan presos más de 10 días cuando entraron a mi casa y me robaron. El argumento del juez fue que estaba bajo el efecto de las drogas y que no era responsable de sus actos. Cuando fui a buscar una respuesta, de algo inexplicable, porque habiendo testigos de que entró a mi casa, me rompió todo, me revisó hasta el último rincón, se llevó mi dinero y muchas cosas de valor, me dijeron que vaya a los medios, que es la única manera de que haya justicia", enfatizó, y en la red social facebook escribió: "Conclusión: entran a tu casa, te roban, te quitan la seguridad de tu hogar y los ladrones están solamente 15 días detenidos. ¡Es una vergüenza! Gracias al juez Pablo Moran por dejarlo en libertad. ¡Seguramente no comete nunca más un delito! Ojalá se haga algo pero lo dudo. Por eso, después estamos como estamos en este país".