Los vestuarios del Club Luján, una obra inconclusa

Los acordes de "no la dejes ir / no la dejes ir" del cantante Alcides se dejaban oír sobre el escenario montado frente a los nuevos vestuarios del Club Luján. La inauguración oficial fue el 16 de mayo pasado, cuando se descubrió una placa con el nombre del entonces precandidato a intendente Silvio Klein, quien había gestionado la obra. Sin embargo, la estructura aún no estaba terminada. Dos meses después, la situación está igual: sólo paredes, el techo y nada más.
La empresa constructora se alejó del predio del barrio San Emilio argumentando falta de pago por parte del contratista. Por eso, el dirigente Gabriel Decunto rompió el silencio. Según explicó, "en un principio la comisión directiva del Club Luján estuvo de acuerdo en inaugurar los vestuarios aún cuando faltaba mucho por terminar. De la construcción sólo está terminada la fachada, falta lo de adentro (grifería, cerámicos, etc.) que en definitiva es lo más caro". En esa línea, sostuvo que "por afuera está todo hermoso, pero no se puede usar el baño porque no tiene perforación ni sanitarios, entre varias otras cosas más que faltan".
"En su momento, se inauguró ante la presión de Silvio Klein, teniendo en cuenta cuestiones políticas y que luego de eso las obras iban a continuar", confesó Decunto. Es que el político que desembarcó en los últimos años en nuestra ciudad tenía intenciones de ser precandidato a intendente por el Frente Renovador. Incluso, hasta último momento declaró en diferentes medios que había inscripto su lista cuando en la Junta Electoral no había nada.
En el medio, el Club Luján pagó las consecuencias de las promesas de épocas electorales. "Se hablaba de una inversión de tres millones de pesos, pero de ninguna manera ese monto está invertido, al menos por ahora en la construcción erigida hasta el momento. Cualquiera que esté en una obra en construcción puede verlo", cuestionó el dirigente Lujanero.
"Lo que se quiere desde el club es sumar y no restar: que Silvio Klein cumpla con lo prometido, que es reiniciar la obra y terminarla. Después del acto de inauguración, al lunes siguiente de eso, se fueron todos, argumentando falta de pago de quien los había contratado", agregó.
Por eso, en los próximos días, "vamos a tener una reunión con Silvio Klein, intentando que esto llegue a buen puerto –sostuvo Decunto-. También hubo culpa del Club Luján de inaugurar algo que no estaba terminado. Pero bueno, seguimos confiando en la palabra y las promesas hechas".
Mientras tanto, la letra de Violeta del cantante bailantero parece tener como destinatario a la empresa constructora, que al final de cuentas terminó por irse.

Sin publicidad
A raíz de esta situación, los carteles de publicidad de Klein sobre la ruta 5 fueron retirados. Además, se analiza quitar la placa en la que se bautizaban los vestuarios con su nombre.