Familiares de los tripulantes del velero Tunante II pidieron en la Basílica que se continúe con la búsqueda

Lunes//Se realizó una misa especial al cumplirse dos meses de la vuelta de campana de la embarcación argentina en aguas brasileñas. Pidieron que no se abandonen los trabajos de rescate

Los familiares de los cuatro argentinos que se encuentran desaparecidos tras la vuelta de campana del velero Tunante II en aguas brasileñas, realizaron ayer domingo una misa en la Basílica para "pedir que se encuentre a los náufragos" al cumplirse dos meses del accidente.
La convocatoria realizada a través de Facebook tuvo eco en decenas de colaboradores que llegaron hasta el templo de nuestra ciudad. Los participantes se acercaron con pancartas en las que pidieron que no se abandone la búsqueda, vestidos con el color verde que caracterizó la campaña lanzada a través de las redes sociales.
La ceremonia se realizó a las 15.30 y estuvieron presentes familiares y amigos de los tripulantes de la embarcación perdida el 26 de agosto. El miércoles, el Ministerio de Defensa informó que continuará con la búsqueda del velero perdido en Brasil, luego de que la Marina de ese país anunciara que concluyó sus tareas sin resultados positivos.
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, instruyó al jefe del Estado Mayor General de la Armada, Gastón Fernando Erice, para que la corbeta "Parker" continúe navegando en el área de búsqueda del Tunante II.
Los argentinos Alejandro Vernero, de 62 años; Jorge Benozzi, de la misma edad; su yerno Mauro Capuccio, de 35 y Horacio Morales, de 62, partieron el 22 de agosto de la Argentina y quedaron a la deriva desde el 26 del mismo mes, cuando fueron sorprendidos por un temporal en aguas brasileñas.
La búsqueda activa de los náufragos había sido interrumpida el 14 de septiembre por Brasil y se reanudó el 10 de octubre, a raíz de una foto satelital aportada por los familiares con la ubicación del velero.
Tomás Vernero, hijo de uno de los náufragos, sostuvo que la imagen, tomada el 28 de septiembre, demostraba que se trataba del Tunante II, al que ubicó a unos 360 kilómetros de la costa de Brasil, por debajo de donde termina el Golfo de Santa Catarina.
Los familiares de los náufragos pidieron que la búsqueda no se limitara sólo a la ubicación indicada en la foto satelital, al advertir que, como fue tomada el 28 de septiembre, la embarcación podría encontrarse en la zona circundante.