Expedición al cerro Champaquí

Domingo//Los atletas Adriana Fattorini y Javier Arzani participaron en Córdoba de la denominada Ultra Trail del Champaquí, una de las carreras más reconocidas y exigentes del circuito nacional de atletismo aventura. Ascendieron hasta los casi 3.000 metros de altura y debieron soportar temperaturas de hasta -4°.

Los lujanenses Adriana Fattorini y Javier Arzani lograron completar los 40 kilómetros de la denominada Ultra Trail del Champaquí, una de las carreras más reconocidas y exigentes del circuito nacional de atletismo aventura, que tuvo lugar en las localidades de San Javier y Yacanto de la provincia de Córdoba.
El recorrido le dio la vuelta y subió hasta los filos del imponente y colosal cerro Champaquí, el más alto de la provincia. Así, los atletas debieron correr a 2.778 metros de altura sobre el nivel del mar. Con un sendero totalmente señalizado para evitar extravíos, la carrera largó desde la plaza de San Javier, mientras que la llegada estuvo programada en el Gran Hotel Yacanto, donde un gran cartel con el mensaje "misión cumplida" los esperaba, como prueba de la complicada competencia. Para eso, tuvieron un plazo de 24 horas para los atletas que afrontaron los 80k y de 12 horas para los atletas de la distancia short de 40k, tiempos más que suficientes para poder completar el recorrido en estilo trekking.
Esta disciplina "short mision", que se disputa desde el año pasado, fue la que afrontaron los dos representantes de nuestra ciudad. Ambos llegaron juntos a la meta con un tiempo de 8 horas y 26 minutos entre los 422 atletas que lograron completar el duro recorrido.
Según contó Arzani a EL CIVISMO, atleta de 24 años y quien es además entrenador de Fattorini, la carrera largó a las 13 del sábado con mucho frío y lluvia. Luego de varias horas de comenzada la carrera, el clima se puse más intenso, con vientos de hasta 70 km/h, lluvias intensas sin cesar, neblina y una temperatura que pasó los -4°, lo cual lo dificultó aún más". A eso se le sumó el cruce en dos oportunidades de un arroyo con aguas heladas hasta la cintura.
De todas formas, ambos siguieron a pesar de las duras inclemencias. "Pudimos continuar hasta llegar al pico máximo del cerro llamado El Filo, donde nos encontramos a 2.800 metros de altura, arrancando a 700 metros para comenzar la vuelta a la tan ansiada llegada", agregó el profesor de educación física quien también participó de la categoría Senior A, único en este segmento ya que todos los corredores eran mayores de 30 años.
"La mayoría de la gente abandonaba a mitad de camino por las condiciones climáticas, la falta de hidratación y la dificultad de la carrera. Vimos personas llorando, gente con necrosis por el frío, luxaciones de clavícula y mucha gente lastimada", relató Arzani.
Finalmente, los lujanenses lograron llegar al Hotel Yacanto a las 21.56, "súper empapados, con mucho frío pero con una enorme sonrisa en el rostro y la medalla en la mano contentos por haberla podido realizar sin sufrir ningún tipo de trastorno. Lo lindo de la carrera fue que pudimos ver los distintos tipos de clima, desde un poco de calor, frío intenso, lluvias, vientos y neblinas como así también el atardecer, la puesta del sol y el anochecer con la puesta de la luna. Fue una experiencia increíble correr por la montaña  solo con la luz de la luna", sostuvo Arzani.
De todas formas, el entrenador lujanense remarcó falencias de la organización en la señalización del recorrido, la falta de hidratación, puestos de control y asistencia médica. "Lo hubo también con el control de los tiempos y las posiciones. Nosotros aparecemos como descalificados como el resto de otros corredores, por lo cual ya nos quejamos frente a la organización", sostuvo.