Walther Cuttini participó del cierre del Mundial de Tango

Si bien Brasil 2014 ya pasó, para los tangueros, el verdadero Mundial es el que se llevó a cabo en Buenos Aires desde el 13 hasta el 26 de agosto. El Campeonato Mundial de Baile de Tango es una competencia internacional que, desde 2003, se realiza ininterrumpidamente en nuestra capital y reúne a miles de turistas que disfrutan de la danza arrabalera. El año pasado asistieron 550.000 personas y además tuvo un agregado distintivo: el bailarín de tango Guido Palacios, oriundo de Villa Filandria, ganó junto a su compañera de baile Florencia Zárate la disciplina de Tango Escenario y se consagró campeón.
Este año, Luján volvió a ser representado por el talento de sus artistas. En este caso se trata del hijo de Enrique Cuttini, uno de los músicos más reconocidos y destacados de la escena la local. Walther Cuttini, de 43 años, fue el pianista elegido para el cierre del Mundial e interpretó la música que dio pie al recitado del extraordinario poeta Horacio Ferrer y a las melodías de la talentosa cantante Julia Zenko. Dos íconos del tango.
"Estuve trabajando en el espectáculo Tanguera junto a Lisandro Adrover. En 2008 el director musical me convocó para ir con Tanguera en París mientras yo vivía en Madrid. Al año siguiente también participé del espectáculo en Broadway. Fue una experiencia increíble, maravillosa. Siempre mantuve contacto con Lisandro y cuando regresé de Madrid puse un estudio de grabación, que actualmente tengo, y él vino a grabar al estudio con sus proyectos. Es una persona que en su momento fue el creador y arreglador de Forever Tango un espectáculo que recorrió el mundo durante muchísimos años. A partir de la relación que tenemos, me convoca para hacer el espectáculo del cierre del Mundial de Tango", comenta Cuttini respecto de cómo surgió esta privilegiada oportunidad.
Mientras ensayaba para el significativo evento, la ansiedad empezaba a notarse pero a su vez se entremezcla con una responsabilidad máxima y un compromiso determinante ya que el piano era el único instrumento durante el espectáculo. "Lo último que hice a nivel pianístico fue con Estela Raval antes que falleciera en Excitante, así que es como un volver a las pistas para mí", señala el músico en relación a los preparativos para el martes 26.
Walther Cuttini es portador de un apellido emparentado con el tango. La herencia familiar fue decisiva en su camino. Desde su abuelo bandoneonista hasta su padre pianista, con el que compartió varios shows realizados en Japón, provocaron que la música porteña se convierta en una compañía natural desde que era muy pequeño.
Si bien sus inicios se gestaron acompañando y tocando con su padre, Walther construyó su propia senda que lo dirigió a una gran cantidad de experiencias musicales.  Durante su juventud fue testigo directo del boom de las bandas de cumbia. Fue el creador y director de Ráfaga y también tocó los teclados en Grupo Green. Después siguió su camino en España, vivió diez años en Madrid exclusivamente de la música. Fue sesionista de Alejandro Sanz, formó parte de las giras de María Vidal y Pastor Soler como tecladista.  Además escribió íntegramente la música para un espectáculo titulado Belladona. Volvió al país hace algunos años atrás y siguió explorando los misteriosos caminos de la música. Fue el pianista, arreglador y Director musical del excepcional cantante italiano Nicola Di Bari y es el compositor de las cortinas del Noticiero del 9.
Asimismo, ya tiene proyectos personales para un futuro próximo: "Pienso retomar con mi propia compañía, Cuttini´s Mission Tango, que está conformada por los bailarines de Tanguera con arreglos de Lisandro Adrover. La idea es mía. Es un musical glamoroso que roza entre lo erótico y el glamour. El espectáculo está pensado para el público extranjero. Es un proyecto for export. De hecho, los temas están compuestos más para el exterior que para el público tanguero de Argentina". Sin dudas, el sendero musical que eligió seguir le deparará nuevas aventuras de la mano del tango o de cualquier proyecto musical.