El Concejo respaldó la colocación de las Baldosas de la Memoria

Viernes//El domingo se hará una jornada de fabricación de esos objetos que serán colocados en distintos puntos de la ciudad. Recordarán el nombre de los detenidos-desaparecidos de Luján y se pondrán en sitios por dónde estuvieron “con sus pasos”.

Con la presencia de la Madres de Plaza de Mayo, Rosa Palazzo y Ana Aguirre, familiares y amigos de detenidos– desaparecidos durante la última dictadura militar, el Concejo Deliberante de Luján declaró de Interés Municipal la jornada de fabricación de baldosas conmemorativas con el nombre de detenidos-desaparecidos de Luján a realizarse el próximo domingo en la sociedad de fomento del barrio Lanusse.
Los concejales consideraron que en Luján, al igual que en el resto del país, "fue atravesada por el terrorismo de estado. Y a la fecha se ha podido reconstruir una lista de 24 detenidos-desaparecidos, todos ellos militantes que nacieron y/o militaron en nuestra ciudad o en otras, siendo los mismos: Rosa María Cano, Georgina Simerman, Mónica María Candelaria Mignone, Omar Santiago Siina, Oscar Alcides Peralta, Dardo Sebastián Dorronzoro, Graciela Ester Erramuspe, Raúl Esteban Aguirre, Jorge Leonardo Elischer, Enrique Guerrero, Julio Navarro, Irma Noemí Tardivo, Vicente Omar Pascarelli, Arnaldo Harold Buffa, Hilda Zulema Vergara, María de los Ángeles Torres, Rubén Raúl Maggio, Alcides Carlos  Ramírez, Carlos Fernández, Ricardo Luis Palazzo, Pedro Nuñez, Juan Carlos Barroso, Carlos Durán y José Alfonso Orellana".
También se considera que "para mantener siempre presente la memoria de estos compañeros y de los 30.000 desaparecidos se realizan diferentes actividades y acciones, como la que se pretenden desarrollar a través de la colocación de baldosas en aquellos lugares que los militantes populares de nuestra ciudad recorrieron con sus pasos y sus prácticas. Lugares que hablan de ellos, porque fueron hijos que nacieron y/o vivieron en Luján, que formaron parte de una generación comprometida en la lucha por una sociedad distinta, igualitaria, justa y solidaria".
Los concejales del FpV-PJ expresaron el total acompañamiento en esta iniciativa "como en toda su lucha a nuestras queridas Madres de Plaza de Mayo y a los familiares y amigos de detenidos-desaparecidos y militantes de Derechos Humanos de Luján".
Durante la sesión del jueves, hablaron a los presentes Jimena Fernández y Ana Aguirre. "Soy Jimena Fernández, una de las hijas de Carlitos Fernández, detenido-desaparecido el 26 de agosto de 1976. Todo pueblo tiene su historia, su memoria; las baldosas por la memoria serán el hablar de las veredas por las que ellos transitaron, serán el recorrido, la reconstrucción de la memoria colectiva, política y social. Serán colocadas donde nacieron y vivieron, donde estudiaron, o donde militaron, donde soñaron un país más justo", expresó Jimena.
"Atravesaremos con la verdad mentiras sistemáticas e interiorizadas en parte de la población", agregó.
"Yo, como mi compañera y muchos de los que nos acompañan, estamos acá para pedir que se nos de permiso para poder poner en algún lugar que hayamos elegido una placa con el nombre de los hijos que nos robaron, porque no son desaparecidos, se los llevaron, no sabemos qué hicieron con ellos, sabemos que lamentablemente llevamos 38 años de lucha sin poder saber qué destino tuvieron", dijo Ana Aguirre.
"Como madre, que amamos los hijos también decimos que venimos con la frente bien alta, con todo el amor de madre, con todo el orgullo de haber parido hijos como ellos, porque no eran ni ladrones ni drogadictos, ni degenerados, solamente eran chicos que amaban al pobre, que querían ayudar, en los barrios más pobres, con algún comestible, hasta con su propia ropa, porque en más de una oportunidad mi hijo, como muchos de ellos salían de su casa con un par de zapatillas sanas y volvían con un par de zapatillas hechas pedazos. ¿Adónde están las zapatillas que te pusiste? Máma, vieja -como él decía-, me dio mucha pena un chico que andaba con los dedos al aire y hacía mucho frío y le cambié sus zapatillas por las mías", relató Ana.
"Y en mi caso –agregó- mi hijo era un chico nacido y criado en la esquina donde vivo yo, y lo conocían los vecinos. (…) Solamente el amor puede llevar a luchar como luchaban ellos. Ellos no podían ver hambre en la casa. En mi casa muchas veces se arregló con pan y mate, y a él no le importaba si pan y mate era una buena comida. Le importaba lo poquito que tenía compartirlo con el otro. Y esos chicos eran merecedores de un gran premio, y ¿ese fue el premio que le dieron? ¿Llevárselos y torturarlo? ¿Hacerlos desaparecer?".