Se inauguró en Pueblo Nuevo la primera plaza integradora del distrito

Con la organización de un grupo de vecinos y el apoyo de la comunidad, la propuesta iniciada hace un año culminó con la inauguración de cinco juegos integradores. De este modo, la plaza Virgen Niña se transformó en el primer espacio de su tipo. “Queríamos tener un lugar donde pudieran jugar todos nuestros chicos. Este es un logro de todos”, señalaron.

Decenas de personas se congregaron ayer por la tarde en la plaza Virgen Niña de Pueblo Nuevo para celebrar la esperada concreción del proyecto Mi Placita Feliz: la inauguración de cinco juegos integradores. De este modo, a poco de cumplirse un año de su lanzamiento, el espacio verde ubicado en Tropero Moreira y Las Catalpas ya ofrece posibilidades recreativas para chicos con discapacidad.
En el acto de apertura Marcelo "Tati" Pérez, uno de los promotores de la iniciativa junto a otros vecinos de la localidad, destacó el deseo inicial de "tener un lugar donde pudieran jugar todos nuestros chicos", en tanto explicó que "como somos de Pueblo Nuevo, decidimos hacer algo por nuestra patria chica y trabajar para tener la primera plaza integradora, no solo de Pueblo Nuevo, sino también de Luján". Por último, agradeció la colaboración de toda la comunidad, que de distintas maneras colaboró para reunir la importante suma de dinero que costaron los juegos: "Sabemos que este es un pueblo especial, la gente es muy solidaria y siempre acompaña estos proyectos. Este es un logro de todos. Ahora tenemos que cuidarla", subrayó.
Los juegos inaugurados son un mangrullo con dos torres, dos cuerpos de tres hamacas cada uno, una calesita integradora con espacio para dos sillas de ruedas y una hamaca diseñada especialmente para sillas de ruedas. Fueron adquiridos a la empresa Crucijuegos, con sede en Rosario, y los fondos fueron reunidos a través de innumerables colectas, rifas, kermeses y eventos.
Ante el aplauso emocionado del público presente, los primeros chicos con discapacidad pudieron hacer uso de las flamantes facilidades recreativas. Mi Placita Feliz es un ejemplo cabal de que cuando los vecinos se organizan para trabajar por su comunidad se pueden lograr grandes cosas. Con este precedente, sus organizadores se entusiasman para ir por más: "La verdad es que dan ganas de seguir haciendo cosas, pero por ahora vamos a disfrutar de lo que hemos logrado", señalaron.